La Plaza Blanca recupera su farola y mejora estéticamente su aspecto.
Es habitual presenciar en la plaza mayor que mocetes ya creciditos estén jugando partidos de fútbol con balones grandes. No es ninguna novedad, sucede ahora y hace 40 años fue igual.
Lo que ocurre es que ahora tienen un sitio destinado en el patio de las escuelas para jugar allí que en nuestros tiempos no existía. La plaza debiera estar destinada para jugar niños a la pelota menores de 5 años, o algo así. Para que anden con pequeñas motos y bicis, para que den los bebés los primeros pasos, etc. Los "niños grandes" son un peligro para los más pequeños o para las personas mayores que pasean por mitad de la plaza si juegan al futbol o circulan con bicis de gran tamaño.
Me doy cuenta que es muy difícil hacer cumplir la reglamentación que por cierto existe al respecto. A nadie le gusta que le critiquen, que le llamen la atención, que le corrijan su comportamiento y por supuesto que le multen. Pero es lógico que la convivencia exige un respeto, cumplir unas normas básicas. Sobre todo lo más importante es entender la razón por la que éstas existen y no pensar únicamente en nosotros mismos sino también en los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario