Un verano más se celebró en la plaza de Ampuero la merienda-cena dedicada a los vecinos mayores, a los jubilados. Una jornada que es esperada por muchos con ilusión para poder confraternizar y mantener animadas conversaciones.
Y por supuesto disfrutar de una sabrosa comida amenizada desde el quiosco por un animador musical.
En la foto el grupo de personas voluntarias que preparó y sirvió los manjares, eso sí, bajos en colesterol.
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