Un año más subieron los ampuerenses y algunos romeros foráneos a festejar en Somahoz al apóstol San Mateo. Dicen que fue recaudador de impuestos pero que cuando Jesús le llamó y le dijo "sígueme" él respondió con prontitud. La climatología soleada, ventosa e incluso cayeron unas gotas de agua pero no llegó a perjudicar la fiesta. Como siempre las familias se reunieron y siguiendo la tradición tomaron unos vinos en el bar de Solana y en el chiringuito improvisado de Tino y luego se sentaron y compartieron la comida campestre, las tortillas, los pimientos, los filetes empanados, etc
En fin, un año más y nos hacemos más viejos pero también vimos a niños como Mateo que por vez primera subió hasta el santuario y eso nos reconforta y nos hace pensar que una generación tras otra seguimos la tradición no por otro motivo que el de intentar pasar un día alegre en compañía de la familia y los amigos y con una mirada cómplice y de soslayo a la Virgen Bien Aparecida recordamos también a los que ya no están. La Banda de Gaitas Cantabria animó adecuadamente la procesión y el ambiente previo a la comida.
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