Homenaje a Libertad Lombera

El salón del Centro Social de Caja Cantabria se abarrotó de vecinos de Ampuero, sobre todo mujeres, para rendir homenaje a Libertad Lombera Gutiérrez  designada como“Mujer Destacable 2015”.

 Ana Viota inició el acto recitando una poesía que subrayaba las virtudes de “la mujer”; no hay que olvidar que esta ceremonia se enmarca dentro de su “ Día Internacional”.

 La concejala Susana Gándara y el alcalde Patricio Martínez, glosaron una semblanza de la galardonada. Se valoró a Libertad Lombera  como el prototipo de mujer rural que silenciosamente ha contribuido al desarrollo de nuestra comunidad. Mujer trabajadora que vivió en una casa humilde del barrio de El Perujo, entonces sin carretera de acceso, sin agua, sin luz. Consiguió con mucho sacrificio sacar adelante una gran familia pues tuvo once hijos; enviudó de Juan García Ruiz y se vio obligada a ejercer tanto las múltiples tareas domésticas como las propias del campo, como arar, segar o atender al ganado.

 

 

                             Susana Gándara, Libertad Lombera y Patricio Martínez

 Un episodio que también recordó Patri, que bien puede ser ejemplo de la vida azarosa de Libertad

 se recogió hace tiempo en este blog y aconteció hace medio siglo, cuando Libertad con 26 años dio a luz a las trillizas, Josefina, Ángela y Margarita. El médico Ramón Rivas, entrevistado entonces por una revista, señaló que fue "el caso más arriesgado de toda su vida profesional, venían asfixiadas y hubo que hacerlas la respiración artificial. Fue un milagro que todas sobrevivieran".

Una pesaba 600 gramos, otra 700 y la tercera 870.

Y sobre la madre, señaló el doctor: "Es una heroína, cuando yo me veía tan apurado, ella me decía, usted atiéndame a las niñas; a mí, déjeme. Y durante el trance, ni un quejido, ni un grito... Y en una casa sin luz, con el agua a más de un kilómetro".

 

 

Libertad agradeció a todas las personas que la eligieron como “Mujer Destacable” al igual que a  todos los presentes por su asistencia y fue obsequiada con una estatuilla conmemorativa.

Libertad estuvo bien acompañada por su familia, nueve hijas y Eduardo y la única hija ausente remitió una cariñosa carta desde Málaga. Lógicamente también asistieron sus nietos y otros familiares.
Por último se cantó “el Himno de Ampuero” y se ofreció un pequeño lunch.