Ayer se lo escuché contar a Abel Verano, un camión que llegaba a la fábrica de Marrón se quedó atrapado en la vías del tren porque equivocó el camino al guiarse por su GPS. Decía Abel Verano que gracias a Tino Carral que lo remolcó con su tractor con mucha eficacia se resolvió el problema porque se esperaba ya la llegada de un tren de mercancías. Imagino que la foto de Abel Verano y la silueta del monte Candiano al fondo de pistas para imaginar el lugar donde ocurrió el siniestro. Tal vez halla que poner más señales de tráfico para indicar la ruta hacia el polígono industrial porque los nuevos avances tecnológicos ayudan pero también pueden crearte problemas inesperados.
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