Este blog no sólo cuenta sucesos de la actualidad, también recuerda hechos muy antiguos. Hoy toca narrar un acontecimiento desgraciado, la muerte de un niño ahogado en un pozo. Hace casi cien años, dos niños vadeaban el río Vallino y fueron a pasar unos atrancos, el niño Manuel llevaba puestas unas albarcas hechas con gomas de cubiertas de automóvil y en una de las piedras resbaló. "El infeliz cayó unos diez metros de profundidad, yendo a parar a un pozo de 5 metros de profundidad"
La hermana que le acompañaba, la niña María pidió auxilio y acudieron varios vecinos de las inmediaciones que con toda urgencia extrajeron al pobre muchacho del agua, todavía con vida, siendo inútiles cuantos humanos esfuerzos se hicieron por salvarlo".
El niño al parecer se dirigía a coger castañas, tenía 12 años, se llamaba Manuel Azcue Sierra, su hermana era Gloria, de 8 años. Sus padres fueron Pedro Azcue y María Sierra.
En el suceso intervino el Juzgado que practicó las diligencias propias de estos casos, ordenando el traslado del cadáver al depósito del cementerio, donde se celebró la autopsia, interviniendo en la misma el reputado facultativo don Ramón Rivas. Esta desgracia ha causado general sentimiento en la industriosa y pacífica villa de Ampuero.
Información: "La Atalaya", 24 de octubre 1925. En la foto el Arroyo Vallino.
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